A las 11:30 de ayer, el centro de vacunación contra la COVID-19, ubicado en el Poliforo de la Universidad Católica de Cuenca, literalmente se encontraba vacío.
A esa hora llegó Juan Narváez acompañado de su hijo, primo y un amigo de sus familiares, quienes tienen entre 13 y 15 años de edad.
Una vez en el lugar preguntó sobre la posibilidad de vacunar a los tres adolescentes, pero el director del recinto les explicó que este proceso en la actualidad está direccionado solamente para mayores de 16 años, y adolescentes entre 12 y 15 con enfermedades agravantes, previa presentación de un certificado médico, según el Plan de Vacunación que lleva adelante el Gobierno Nacional.
Narváez compartió que la mañana de este lunes recorrió la ciudad en busca de vacunas para los menores de edad, pero la respuesta siempre fue la misma. “Vengo por el colegio Antonio Ávila, Indurama y ahora venimos a la Universidad Católica, en donde me he encontrado con varios padres de familia, quienes tratan de inmunizar a sus hijos, pero los doctores nos responden que debemos esperar el cronograma establecido, lo que me parece injusto porque los centros de vacunación están vacíos y hay mucha gente que quiere vacunarse, especialmente niños y adolescentes”.
El padre de familia finalmente hizo un llamado a las autoridades para que revean esta situación. “La edad de vacunación debe extenderse para los más jóvenes, pues pienso que las personas mayores ya hemos sido vacunadas en su mayoría. En mi caso personal, todos los trabajadores de la empresa en la que laboro ya fuimos inoculados hace muchos días”.
Pedro Pesántez, uno de los jóvenes que llegó junto a Juan Narváez, contó que quiere vacunarse para retomar las actividades cotidianas como el estudio, eso sí, manteniendo las debidas medidas de bioseguridad. “Es una pena que no nos han querido inmunizar en los diferentes centros de vacunación sosteniendo que todavía no nos toca el turno por nuestra edad, sin embargo, creo que debería adelantarse este proceso para así poder llegar a más personas en el menor tiempo posible”.
El estudiante de 14 años que pertenece a la Unidad Educativa Rafael Borja acotó que le gustaría retomar las clases presenciales. “La vacuna reduce la mortalidad, por lo que debemos seguir cuidándonos para regresar a las aulas…hace mucha falta interactuar directamente con los compañeros y profesores”.
Fuente: El Mercurio
