Centros de acopio se abrieron en distintos puntos de Cuenca para la recolección de insumos en beneficio de los afectados por el hundimiento en el cantón Alausí. También se ha destinado recursos humanos para apoyar en distintos frentes. Urge ropa para bebés y niños.
En medio del desastre que vive Alausí surge la solidaridad desde Cuenca y el país. Por la tragedia que viven los habitantes de la provincia de Chimborazo, instituciones arman una cruzada de ayuda y de aporte con profesionales en diferentes áreas para afrontar la crisis.
La primera entidad en hacerlo fue la Cruz Roja de Azuay, que en horas de la mañana ya envió seis personas del equipo de Evaluación de Daños, Análisis y Necesidades (EDNA). Entre ellos, está el actual presidente de la Junta Provincial de la entidad, Cristian Astudillo.
Belén Caguana, vocera de la Cruz Roja local, pidió la donación de alimentos no perecibles, ropa, mantas, agua, arroz y productos de aseo personal. De 08:00 a 17:00 estará abierto el centro en la sede ubicada en la calle Borrero y Presidente Córdova.
Recomienda que la ropa a donarse esté en buen estado y que los alimentos no estén a punto de caducar. Las donaciones se receptan en el auditorio de la institución. Por el momento, lo que más hace falta es ropa para bebés y niños.
Entre los primeros donadores consta la familia Bravo. Una de ellas, Dayanara Bravo, comentó que este es un buen momento para apoyar a la gente que lo necesita. “No sabemos cuándo lo necesitemos nosotros”, agregó.
Otro punto de donación que se habilitó fue la sede de Acción Social Municipal. Pasadas las 12:00 se informó desde esta dirección la recepción de donaciones.
De forma adicional, se requiere cobijas, almohadas y otros bienes similares. Acción Social está ubicado en las oficinas del Parque La Libertad (antigua cárcel) en las calles Nicanor Merchán y Eugenio Espejo de 08:00 a 20:00 de lunes a viernes y los fines de semana de 08:00 a 14:00.
Dos centros de acopio se habilitaron en la Universidad de Cuenca. El uno en el Departamento de Vinculación con la Sociedad y en la sede de la FEUE.
Desde lo profesional, la Facultad de Psicología enviará una brigada de emergencia para atención a las víctimas. También la Facultad de Ingeniería trasladará a expertos para evaluar daños estructurales en viviendas, analizar la situación geológica del sector y estudiar las posibles variantes en las vías.
De parte de la Facultad de Ciencias Agropecuarias se efectuará el diagnóstico del estados sanitario de los animales de producción y de compañía.
El deslizamiento en Alausí solo agravó la situación vial en la región. Cerca de 150 metros de vía se perdieron por el grave deslizamiento y esto obligó a buscar rutas alternas para llegar bajar a las provincias del sur del país.
Para viajar de Chimborazo a las provincias del sur, se usaba una variante denominada Pueblo Viejo. El tramo entre Alausí y Chunchi colapsó ayer por el intenso tránsito vehicular.
En la Terminal Terrestre de Cuenca, los conductores del transporte interprovincial que arribaron en horas de la mañana se mostraron preocupados por la situación en Chimborazo. “Es algo insoportable, da miedo, me desvié”, señaló Orlando Minda, conductor de un bus de Flota Imbabura.
Mientras que a Jorge Tacuri, conductor de Turismo Oriental, le tomó 12 horas llegar a Cuenca desde Quito.”No paramos ni a comer… antes lo hacíamos en Alausí, pero con todo esto, no sabemos que vaya a pasar”, refirió.
Agregó que los daños viales no son actuales y que requieren atención urgente.
Incluso el presidente Guillermo Lasso padeció los problemas viales que no le permitieron llegar a Alausí y prefirió irse a Machala para entregar bonos a los afectados por el sismo reciente.
Fuente: Mercurio
