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Indígenas siekopai de Ecuador reclaman 42.000 hectáreas de reserva natural

La nacionalidad indígena siekopai, que habita en la Amazonía de Ecuador, presentó este jueves un recurso legal para reclamar más de 42.000 hectáreas que consideran parte de su territorio pero que fueron incluidas dentro de una reserva natural sin ninguna consulta previa en la que dieran su consentimiento.

La acción de protección fue presentada ante la Unidad Multicompetente de Justicia de Shushufindi, de la amazónica provincia de Sucumbíos, en contra del Ministerio de Ambiente, Agua y Transición Ecológica, encargado de administrar la Reserva de Producción de Fauna Cuyabeno, establecida en 1979.

Dentro de las más de 590.000 hectáreas que abarca la reserva está la zona de Pë’këya, también conocida como Lagartococha, un espacio de 42.369 hectáreas que los siekopai, con una población menor a los 800 miembros, consideran que es parte de su territorio ancestral.

Una delegación del pueblo siekopai realizó este jueves una marcha por las calles de Shushufindi hasta llegar a los exteriores de la Unidad Multicompetente de Justicia.

“Estamos presentes para exigir que nuestro territorio ancestral sea entregado de nuevo a la nación siekopai, para que la Justicia reconozca a los verdaderos dueños», sostuvo el presidente de la nación siekopai, Elías Piaguaje.

«Es una vergüenza que, por la falta de actuación del Estado, nosotros vayamos a desaparecer. Como nuestros hermanos tetetes, nosotros no queremos desaparecer”, añadió.

Con esta acción legal, los siekopai buscan «obtener el título de propiedad colectiva sobre Pë’këya y sentar un precedente para otros pueblos y nacionalidades indígenas» con casos similares, según indicó en un comunicado conjunto de la nación siekopai, la organización ambientalista Amazon Frontlines y la Alianza Ceibo.

De acuerdo a este colectivo, hay otros territorios ancestrales que también han sido arbitrariamente demarcados por el Estado como áreas protegidas, lo que impide a los indígenas el pleno ejercicio de sus derechos territoriales y operando una forma de despojo.

Fuente: La Hora