Cuenca,  Cuenca Destacadas

Azuay con 2 comunidades protectoras ante violencia

En la provincia del Azuay se certifica a dos sectores como las primeras “Comunidades protectoras de la niñez y adolescencia”. Se trata del barrio Antonio Vera, del cantón Gualaceo; y la parroquia Sayausí, de Cuenca.

Los Consejos Cantonales de Protección de Derechos de las jurisdicciones respectivas entregaron está certificación a sus dirigentes como resultado de un largo proceso que involucró a diferentes instituciones.

El programa Aldeas Infantiles SOS fue la encargado de guiar a 300 familias de estas localidades. Lo hizo mediante una serie de actividades para que se reduzcan los niveles de violencia y maltrato.  

Comunidad protectora en barrio Antonio Vera ante violencia

En el barrio Antonio Vera, de Gualaceo, iniciaron en el año 2019 las actividades para favorecer a 120 familias. En el sector eran evidentes los casos, e, incluso el barrio llegó a ser considerado como una zona “roja” del cantón.

Pablo Matute, presidente del barrio, recordó las dificultades que existían en la zona que afectaban los derechos de los grupos vulnerables. “Hoy, ya conocemos las rutas y protocolos de acción ante una presunta vulneración”, señaló Matute.

Igualmente, resaltó que se ha podido identificar con los talleres a nuevos líderes para el desarrollo del sector.

Comunidad protectora en Sayausí ante violencia

Algo similar sucedía en la parroquia Sayausí, de Cuenca, por los casos de violencia y maltrato familiar. Las actividades iniciaron en el 2017 para beneficiar a 180 familias.  

Verónica Sánchez es una de las 13 líderes que se formaron como resultado del proyecto. La mujer expresó que en la parroquia el maltrato a las mujeres físico y verbal era un gran problema.

“Formamos el grupo para realizar el trabajo de aldeas para apoyar a las mujeres víctimas de vulnerabilidad. No todas las mujeres tienen la misma historia”, aseguró Sánchez.

Formación para las 2 comunidades protectoras

Las actividades para la certificación de estos sectores iniciaron con una fase de concienciación que identifique a los actores comunitarios y sociales.

De esta manera se cumplieron con procesos de sensibilización, fortalecimiento de la organización comunitaria que defina un plan de acción con una visión al futuro y la potenciación de capacidades.

Fuente: Mercurio