A Karen Samaniego le robaron cerca de 3.000 dólares que tenía en una cuenta en un banco en Cuenca. Su dinero fue transferido a un cliente de esta misma entidad financiera, pero que está en Manta.
Ella asegura que nunca hizo esta transacción y que solamente se enteró de esta cuando fue a retirar su plata para pagar una cuenta en una clínica por una operación de su hija.
Cuando reclamó en la institución bancaria le dijeron que nada podían hacer y que al parecer por algún descuido alguien sustrajo sus datos y claves bancarias.
A Hugo Morocho le ocurrió algo similar. Tenía 4.200 dólares en su cuenta y con dos transacciones la vaciaron. A su correo electrónico le llegó un mensaje y allí descubrió el robo.
Morocho afirma que cree que vulneraron su cuenta, pero no se explica por qué la notificación llegó de manera tardía. Puso una denuncia para que esto se investigue.
“Lo que me dijeron en el banco es que ellos se encargan de custodiar el dinero, pero que son los clientes quienes tienen las llaves y que por lo tanto no pueden responder por esta pérdida…”, relató.
Juan Salazar, abogado, ha recibido en lo que va de este mes seis casos de este tipo de atracos, y considera que se trata de delincuentes que roban información por medio de artimañas digitales.
“Generalmente aprovechan algún descuido para sustraerse información y claves; para vulnerar sistemas informáticos; y para clonar datos de los usuarios para suplantar identidades incluso…”, manifestó.
Acota: “aunque pase esto consideramos que hay una responsabilidad de los bancos, pues cuando uno hace una transacción debe ser notificado y aceptar la misma, esto es por seguridad…”.
Salazar indica que en estos casos se debe presentar una denuncia en la Fiscalía para que investigue el delito de robo; y una queja en la Superintendencia de Bancos para que indague la gestión del banco.
Miguel Castro, ingeniero en sistema, especialista en seguridad informática y perito legal, explica que el principal método que usan los delincuentes para robar información personal es mediante correos electrónicos.
“A usted le envían un correo, en algunos casos incluso con los logos y diseños de los bancos. Usted da un click en un link que le mandan y prácticamente les da libre acceso a su computador o teléfono…”, asevera.
Añade: “es verdad que los bancos tienen sistemas de seguridad informática que cada día son más sofisticados, pero no pueden evitar que un delincuente se haga pasar por usted…”.
Entre las principales recomendaciones que da Castro está evitar abrir sus cuentas bancarias digitales en diferentes computadores o celulares. Hay que destinar un solo dispositivo para esto.
También sugiere no reutilizar las contraseñas y configurar todas las autentificaciones de seguridad que ofrecen las plataformas digitales de los bancos.
Fuente: Mercurio
