Ciencia, innovación y sostenibilidad son los tres pilares que han consolidado a Cemento Atenas como referente de calidad a escala nacional.
En un momento en el que luchar contra el cambio climático representa retos y desafíos, la empresa ha marcado su hoja de ruta, orientada hacia la reducción de emisiones contaminantes, inversión en tecnología, gestión del conocimiento y adhesión a los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
“La industria trata de resolver aspectos de cómo ser eficiente. Aunque la ubicación de Cuenca no es la ideal para la producción de cemento, por aspectos logísticos. Hemos convertido las restricciones en fortalezas”, enfatizó Xavier Alvarado, Gerente General de Cemento Atenas.
La estrategia es emplear energías alternativas y materias primas que mitiguen el impacto ambiental. En este sentido, la compañía ha reducido el consumo de clínker, el material base para fabricar los distintos tipos de cemento. Lo han sustituido por materiales como las calizas, las puzolanas naturales y los residuos de escombros.
Otro paso en esta línea es el uso de la tecnología de molino vertical, que permite disminuir un 40 % el consumo energético.
Estas medidas se traducen en una reducción del 34 % de emisiones de dióxido de carbono (CO2) en la producción del cemento estructural y hasta un 57 % de reducción de emisiones en el cemento para mampostería (Master Atenas) que hoy es el cemento más ecológico del mercado ecuatoriano.
Para la empresa, el 2022 fue un año de reactivación económica postpandemia. Pese a la reducción de inversión desde el sector público, se registró una importante recuperación y buenos resultados en el sector privado, que permitió a la empresa crecer en un 20 %, dentro de este segmento.
“Lo que falta para que haya una recuperación plena, que se espera para 2023-2024, es más inversión desde lo público, que es lo que más reactiva a la industria del cemento y de la construcción”, comentó Alvarado.
En esta ruta de expansión en el mercado, la prioridad para Cemento Atenas es la excelencia, que han logrado con el cumplimiento de estándares nacionales e internacionales. El objetivo es claro: la calidad no se negocia.
Fuente: DMC
