Este 17 de noviembre del 2023, los 137 asambleístas, electos hasta el 2025, asumirán funciones y participarán en la primera sesión de la Asamblea Nacional, en la sede del Palacio Legislativo, en Quito.
La actividad de más importancia, después del acto ceremonial, es la designación de las autoridades del Consejo de Administración Legislativa (CAL), conformado por el Presidente de la Asamblea, dos vicepresidentes y cuatro vocales.
Siguiendo los anuncios de los legisladores, integrantes de las bancadas del correísmo (RC), ADN y el Partido Social Cristiano, el asambleísta Henry Kronfle tendría el apoyo necesario para llegar a la Presidencia; no obstante, todo puede suceder a último minuto.
Las Vicepresidencias serían una para el oficialismo y otra para el correísmo. En el CAL cada una de estas organizaciones, contando el PSC, tendrá una vocalía, y también le correspondería una a Construye.
En el caso de esta último movimiento político se espera que tengan los votos para conseguirlo, puesto que, al ser menos, dependen de la voluntad de los otros legisladores. Se sabe que han puesto condiciones para permitir esa participación.
A horas de la posesión, las bancadas legislativas se desintegran
En días recientes, previos a la instalación de la primera sesión, los diálogos entre asambleístas se han intensificado y la conformación de las bancadas cambia cada hora.
RC, ADN y PSC son bancadas que tienen más certezas sobre el número de integrantes. Son 51, 25 y 18, respectivamente, de acuerdo con sus voceros. El correísmo perdió uno de sus miembros, Ferdinan Álvarez; el oficialismo ganó 11; y el socialcristianismo se mantiene, respecto a cómo comenzaron, tras los resultados de las elecciones anticipadas.
Construye cuenta con 18 miembros, comenzaron con 29 y se dice que podrían perder otros integrantes. Algo que se definirá en esta sesión es si el jede de esa bancada, Patricio Carrillo, llega a posesionarse, pues tendría un impedimento para ejercer la función pública por el juicio político que pesa en su contra.
En las minorías hay menos cohesión. Se estaba conformando una bancada que se había autodenominada Ética Política, conformada por representantes de movimientos políticos que consiguieron pocos curules, sin embargo, ninguno de sus miembros se atreve a soltar la cantidad de miembros, porque estarían separándose varios de ellos.
Fuente: La Hora