Los hinchas del Deportivo Cuenca y Gualaceo SC se apuntaron un verdadero golazo en el Estadio Banco del Austro – Alejandro Serrano Aguilar.
Sin necesidad de ocultar su preferencia por uno u otro equipo, compartieron graderíos en las diferentes localidades y disfrutaron en familia o entre amigos de un espectáculo futbolístico que pasó la historia del balompié profesional ecuatoriano.
Uno de los abanderados en fomentar la hermandad en el fútbol es don Ramiro Segarra, de 50 años. Asistió al estadio con una camiseta que identificaba a los dos clubes azuayos que por primera vez se enfrentaban en la LigaPro Serie A.
Don Ramiro nació en la comunidad de Cristo Rey, en el cantón Gualaceo. A la edad de 10 años empezó a seguirle al Deportivo Cuenca, motivado por unos amigos que les encantaba el fútbol.
Cuando se creó Gualaceo SC empezó a seguirle desde su participación en el Ascenso Provincial.
“Cuando el Gualaceo SC estuvo a punto de ascender hace tres años atrás, cuando su delantero era Federico Laurito, hice una primera camiseta con los dos colores”, indica Segarra, quien presta sus servicios como chofer operador a la Empresa Municipal de Aseo de Cuenca (EMAC).
Con apoyo de su hijo, profesional en diseño, está pensando seriamente en mandar a confeccionar más camisetas para el resto de la familia.
“Antes cuando venía a jugar Barcelona SC, Emelec, Liga de Quito, todo el estadio se teñía de los colores de los equipos. Ahora por las malas barras tienen que separarles”, lamenta y añade que en los graderíos se debería disfrutar el fútbol en paz y al final intercambiar camisetas como hacen los jugadores en la cancha.
Fuente: El Mercurio
