Empresarios y Cámaras del Azuay han mostrado su molestia y preocupación sobre la derogación del Reglamento Técnico 033 de Baldosas Cerámicas, con fecha del pasado lunes 10 de enero de 2022.
La Cámara de Industrias, Producción y Empleo de Cuenca (CIPEM), emitió un comunicado en el que exhortó al Gobierno Nacional a reversar la decisión de derogación del señalado Reglamento Técnico y pidió que acciones como la ocurrida, se tomen en consenso con todos los sectores involucrados.
Andrés Robalino, director ejecutivo de la CIPEM, señaló que en ningún momento fueron invitados a ninguna reunión o se les consultó sobre el tema. “Ahí el primer principio básico de este Gobierno que se está incumpliendo. Segundo, cuando se cambian las reglas del juego se llama inseguridad jurídica”, dijo Robalino.
El Reglamento Técnico inició en el año 2006, cumplió con sus filtros, análisis, procesos, consultas, bajo tema legal nacional e internacional. “Lo que se tiene en la actualidad es la derogación de un documento que defendía al consumidor para que ingresen productos de calidad al mercado ecuatoriano”, detalló.
A partir del 15 de febrero, cuando entre en vigencia esta derogatoria, se permitirá el ingreso de cualquier tipo de producto al país, sin cumplir con los estándares de calidad. “El afectado final será el consumidor porque encontrará en el mercado productos de mala calidad que estarán al mismo precio o en precios menores al producto de buena calidad. El consumidor va a tener que comprar constantemente porque se va a romper, dañar o tener un daño constante”, dijo Robalino.
Esta situación es la que preocupa a la CIPEM, en la que se asegura no se ha pensado en el consumidor, introduciendo al mercado productos de mala calidad sin información si cumplen o no con la calidad. “Es obvio que un producto que no invierte en calidad va a ser más barato que un producto que lo hace”, se refirió Robalino.
Por ahora, buscan un diálogo con el Gobierno Nacional para que se convoque a una reunión con el sector importador, productor y academia y así revisar el Reglamento Técnico. Hasta la fecha no existe una respuesta por parte del Ministro de Producción y han conversado con la viceministra de producción Carla Muirragui. “Su propuesta ha sido trabajar en un nuevo Reglamento Técnico, pero podría tomar un año y medio, dos años y en ese tiempo ingresará producto de mala calidad al país”, mencionó el representante de la CIPEM.
Empresa
La decisión de derogar el Reglamento Técnico también generó una sorpresa para la industria de la cerámica local, ya que en Azuay se concentra más del 80 % de esta industria del país.
Juan Pablo Malo, gerente general de Graiman, señaló que esta derogatoria los convierte en vulnerables frente a la responsabilidad con el consumidor. “Más allá de cualquier afección que puede tener una empresa o un comercializador de cerámica plana, se daría una desregularización del mercado en términos de calidad, etiquetado e incluso de promoción comercial, frente a lo que se ofrece a lo que recibe el consumidor”, dijo Malo.
Este tipo de Reglamentación Técnica está presente en todos los países de la región y el mundo. En el caso de Graiman exporta sus productos a Estados Unidos, Colombia, Perú y hasta Europa; en estos países tienen normas exigentes, con el objetivo de que se garantice una plena competencia entre los actores en el mercado y así el consumidor siempre esté expuesto a condiciones y declaraciones fundamentadas, reglamentadas y certificadas en torno a la calidad del producto que se adquiere.
“Esta decisión es la firma del acta de defunción del sistema de calidad en el país. Entonces qué sentido tiene una institución como el INEN en Ecuador si no van a existir reglamentos sobre los cuales se generarán certificación alguna”, fueron las declaraciones de Malo.
Fuente: El Mercurio