La Sala Penal de la Corte Provincial de Justicia del Azuay aceptó el recurso de apelación interpuesto por la Fiscalía y sentenció a Juan Andrés Vintimilla, alias Mangajo, a 29 años y cuatro meses de privación de libertad por violación a una adolescente.
El Tribunal de la Sala integrado por los jueces Katherine Aguirre (ponente), Julia Elena Vásquez y Julio Inga informará respecto a la reparación integral para la víctima en la sentencia emitida por escrito.
En la audiencia de apelación intervinieron las fiscales Alejandra Ledesma y María José Flores, quienes argumentaron que el Tribunal Penal -con voto de mayoría- ratificó el estado de inocencia de Juan Andrés Vintimilla, sin haber valorado adecuadamente el testimonio anticipado de la víctima, que es considerado prueba fundamental.
La tesis de Fiscalía fue aceptada por los Jueces, por considerar que durante el desarrollo de la investigación y del proceso penal la víctima incrimina de forma persistente a Juan Andrés en el ilícito.
De acuerdo con un informe de la Fiscalía, la investigación demostró que Juan Andrés contactó a la víctima mediante la red social Facebook, cuando ella tenía 16 años. Para lograr entablar una amistad, aparentó tener 19 años, sin embargo tenía 33 años.
Luego de varias conversaciones, el supuesto joven invitó a la adolescente a un centro comercial. El 21 de junio de 2018 se dio el primer encuentro, en el cual el ahora sentenciado se presentó como otra persona, entonces la víctima supo que era un hombre mayor.
Durante la conversación Juan Andrés sacó un arma de fuego y obligó a la víctima a dirigirse hasta el parqueadero para subirse en su vehículo. Bajo intimidación y amenazas le dijo que si desde ese momento no le trataba como su pareja iba a atentar contra su vida.
Juan Andrés trasladó a la adolescente -en varias ocasiones- hasta su domicilio, situado en el sector Puertas del Sol, en Cuenca, donde le obligaba a tomar una bebida que le hacía perder el conocimiento, para luego violentarla sexualmente.
A más del testimonio anticipado de la víctima, Fiscalía sostuvo la acusación con los testimonios de la mamá y hermana de la adolescente, de los peritos que practicaron las valoraciones de psicológica, trabajo social y médico-legal a la víctima, así como de un psiquiatra que la atendió.
Fuente: El Mercurio
