La Casa Blanca señaló este martes que las familias en proceso de deportación expedita que aleguen “miedo creíble” de volver a su país podrán solicitar asilo u otro amparo migratorio ante un juez.
La portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo en su rueda de prensa diaria que las personas en proceso de deportación, o que estén siendo procesadas, “tendrán la oportunidad de presentar sus casos ante un juez de inmigración”.
Psaki se pronunció después de que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) informó en un comunicado que reanudará las deportaciones expeditas de “ciertos grupos familiares” que cruzan de forma irregular la frontera.
Según la portavoz, el procesamiento de los inmigrantes para su expulsión acelerada “es un medio legal y tradicionalmente empleado” para asegurar la frontera.
Asimismo, defendió que este es “un paso” hacia el objetivo “más amplio” de la Administración del presidente Joe Biden de “tener un sistema de inmigración seguro y ordenado”.
Psaki subrayó que intentar cruzar hacia Estados Unidos eludiendo la inspección de los puertos de entrada “es peligroso” y acarrea consecuencias “a largo plazo para la inmigración”.
“Los individuos que están solicitando asilo, que lo merezcan, serán tratados como corresponde”, zanjó la portavoz.
Un plan difundido este martes que describe los “próximos pasos” que tomarán las agencias federales en materia de migración incluye entre las tareas “mejorar el proceso de remoción expedita para quienes lleguen a la frontera”.
El objetivo, según el documento, es “determinar de manera justa y eficiente qué personas tienen solicitudes legítimas de asilo y otras formas de protección”.
Fuente: El Universo