Con una prueba de perfil genético, la Fiscalía confirmó que un cadáver que fue encontrado en marzo de 2020 era de Admaris Isabel Orbe Correa, de 39 años. Luego del debido procedimiento que duró alrededor de un año, el cuerpo fue entregado a los familiares; ayer se cumplieron las honras fúnebres.
Admaris Isabel fue reportada como desaparecida el 1 de abril de 2019. Aquel entonces, los allegados señalaron que ella como parte de sus actividades diarias salió rumbo a un gimnasio y no retornó a casa. La búsqueda fue intensa en coordinación con la Policía Nacional. Transcurrieron los meses y la búsqueda quedó en proceso de investigación.
Leonardo Amoroso, fiscal Provincial del Azuay, detalló que el hallazgo del cuerpo se produjo en marzo de 2020 en el río Paute, en el conocido embalse de Mazar. El cuerpo fue llevado al Centro Forense donde permaneció para el proceso de identificación.
En un inicio fue comparada una fotografía de Admaris Orbe y los investigadores verificaron que, la forma de algunas piezas dentales coincidía con la persona reportada como desaparecida. Las autoridades dispusieron que se realice un examen antropológico. Tras estas primeras pericias, la Fiscalía también solicitó una prueba de ADN y que se coteje con muestras entregadas por la madre de Admaris. En junio de este año se constató que se trataba de ella, pues el resultado del perfil genético reveló la compatibilidad del 99.9 %.
La causa de la muerte se mantiene en proceso de investigación. Mientras tanto, la Fiscalía autorizó la entrega del cadáver para la sepultura. Ayer, allegados cumplieron el velatorio de los restos mortales.
Fuente: El Mercurio
