A partir de la divulgación de los mensajes que habrían mantenido varios funcionarios municipales con Sebastián Yunda, hijo del alcalde, Jorge Yunda, la inestabilidad institucional de la Alcaldía también se ha reflejado en la salida y rotación de altos mandos de la administración capitalina.
Asesores, directores, secretarios y gerentes han puesto la renuncia, han sido despedidos o movidos a otros cargos.
A propósito de los chats, Christian Acaro y Cynthia Puga, que se desempeñaban como asesores del alcalde, fueron separados, al igual que Carlos Poma, que era director de Informática.
Además, el alcalde aceptó la renuncia de Diego Jara a la Secretaría de Cultura. Su nombre es uno de los que aparece en el intercambio de mensajes que investiga la Fiscalía desde abril.
Carlos Poma dijo a EL UNIVERSO desconocer las razones por las que fue separado. “Yo ni el teléfono tengo del señor Sebastián Yunda y no he hablado con él nunca, así que desconozco (…); no sé ni a qué se dedica”. Añadió que su contrato era como funcionario de libre remoción, así que “es potestad de la autoridad removerme el momento en que considere”.
El alcalde Yunda, de su parte, dijo en un comunicado y en sus redes que dispuso la separación de funcionarios, aunque eso no signifique que se haya comprobado algna irregularidad.
Fuente: El Universo