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Las Unidades de Cuidados Intensivo de las clínicas y hospitales de Cuenca están saturadas

Más de 12 horas tuvo que esperar ayer María C. para encontrar una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) para uno de sus familiares, afectado seriamente por el COVID-19. Toda su familia se enfermó y dos de sus parientes permanecen en estado crítico.

Su drama es el de al menos 25 personas que se encuentran en lista de espera para una cama UCI en el hospital “José Carrasco Arteaga”, del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), en Cuenca, y el de varios pacientes más que siguen llegando a las salas de emergencia en busca de espacio para salvar sus vidas.

Un reporte de la Coordinación Zonal 6 de Salud da cuenta que, desde el pasado fin de semana, las camas de cuidados intensivos para enfermos con COVID-19 están llenas en el sector público.

Al lunes, las 35 camas UCI del hospital “Vicente Corral Moscoso”, las 28 del hospital del IESS, las ocho del hospital “Homero Castanier”, de Azogues, y seis de las siete existentes en el Hospital General de Macas estaban ocupadas. Para ayer no quedaba ninguna libre.

El lunes también se registró la disponibilidad de dos camas en la clínica Latino, una más en el hospital Santa Inés, otra en el hospital del Río y una adicional en el Monte Sinaí, pero para la noche de ayer esas también se llenaron. El hospital Municipal de la Mujer y el Niño cuenta con cinco espacios para pacientes críticos de coronavirus que al igual que en los otros centros médicos están ocupados en su totalidad.

Fuente: El Mercurio