Quienes forman parte de la actual administración de la Federación Deportiva del Guayas (FDG), que la preside Roberto Ibáñez, y que tiene más de siete meses en funciones, desconocen la fecha en que se entregó la estatua del mejor jugador del fútbol ecuatoriano Alberto Spencer Herrera a la matriz del deporte amateur del Guayas, solo saben que al inicio de su gestión la encontraron abandonada, en franco deterioro y con su base de madera malograda por el agua.
Ibáñez expresó que en su empeño para construir el Camino de las glorias deportivas se propuso recuperar la estatua de Spencer, junto a otras que también están abandonadas debajo de los graderíos del estadio, para rendirle homenaje al mejor futbolista que ha tenido Ecuador, y anunció que asimismo se colocarán estatuas en homenaje a Jacinta Sandiford, Pancho Segura, Jorge Delgado Panchana, Jefferson Pérez, Nicolás Lapentti, Andrés Gómez, Seledina Nieves, Alexandra Escobar, entre otros deportistas que llenaron de gloria al país con sus triunfos deportivos.
Ayer, en un acto corto pero sencillo, que tuvo como invitado especial y de forma presencial a uno de los sobrinos de Spencer, Marcos; y de forma telemática a su hija Jacqueline, se presentó la estatua totalmente renovada y que reposa en una base de cemento de dos metros de alto y un radio de cuatro; mientras que la esfinge mide dos metros de alto.
Fuente: El Universo
